Caso Genie

 El caso de Genie alude a la experiencia de una niña recluida por sus padres durante sus primeros 13 años. No tenía ningún tipo de estimulación emocional ni socialización, Esto impidió que la niña adquiriera el manejo de un lenguaje complejo, solo geticulaba ciertos sonidos como respuesta a los estímulos externos. A pesar de tener 13 años cuando empezó la intervención con ella, nunca logró manejar ningún lenguaje complejo con fluidez.

Esto es un claro ejemplo de las horribles consecuencias de la falta de exposición a estímulos sociales (contexto, factores ambientales..) Carecer de relacionarse con otros seres humanos en periodos fundamentales para el desarrollo. La falta de socialización afecta de diferentes formas a la maduración cerebral.

Es tan perjudicial que impacta y retrasa el desarollo cerebral en general. Así, la ausencia de relacionarse no solo afecta al ánimo y la conducta, sino también a la salud cognitiva y a la motricidad.

Como futura educadora social, he intentado diseñar una intervención si tuviera presente este caso en mi trabajo.

A partir de toda la problemática que se muestra (maltrato, aislamiento, desnutrición…)la intervención que se haga tiene que ser completa.

En lo que respecta al aspecto sociofamiliar, sabemos que el problema está en la familia, más concretamente en el padre de Genie. También uno de los mayores problemas que encontramos es que la niña, cuando salió del hospital, es que pasó por muchas familias diferentes, lo que la producía distintos miedos y así no podría llegar a adaptarse e insertarse en la sociedad.

Para empezar, sería preciso que un psicólogo evaluara a la niña así como su estado. Seguidamente, intentaremos que la niña durante un tiempo esté con personas que le ofrezcan esa confianza y seguridad, que se encuentre en un ambiente cómodo y seguro, para que la niña empiece a demostrar lo que es capaz de hacer o lo que sabe.

Genie, al estar aislada, desarrolló también problemas para hablar, lo que resulta indispensable para su adaptación en la sociedad, pues necesita comunicarse con los demás para una buena inserción. Para resolver este asunto, sería preciso que ayudara y tratara este aspecto de Genie, para lidiar con esas dificultades que presenta en el habla.

Una vez que Genie quiera colaborar y comience a expresarse por palabras y no por gestos, sería conveniente enseñarle a hacer actividades de la vida cotidiana tales como desayunar, vestirse , asearse.

Paulatinamente, se irían introduciendo la presencia de otras personas u otros niños de su edad, para que se acostumbre a la compañía humana y no sienta miedo, o que lo vea como algo peligroso o nocivo para ella.

Sería fundamental intervenir también con su padre, ya que es el causante del daño que ha causado a su hija.

Si estás intervenciones fueran favorables y positivas, se podría buscar una familia que pueda cubrir las necesidades de la niña , pero haciendo antes una evaluación , asegurándonos de que la convivencia sería armoniosa y cómoda para todos.